Desembarco en Izaro

Isla de Izaro

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A las 8:00 de la mañana había quedado con Aitor Galarza en el puerto de Bermeo. Nuestra intención era desembarcar en la isla de Izaro, ubicada dentro de la Reserva de Urdaibai, para anillar ejemplares de Garceta común (Egretta garzetta) y Gaviota patiamarilla (Larus michahellis).

Colonia de Garceta y parte de la de Gaviota patiamarilla

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A las 8:30 poníamos pie en la isla gracias a salvamento marítimo. Lo primero es ponerse un casco para evitar los golpes en la cabeza que nos van a dar las gaviotas al entrar en su colonia de cría.

Zodiac de Salvamento marítimo

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Medio en broma Aitor plantea nuestro primer "experimento" que va a ser comprobar si las gaviotas tienen predilección por algún color en especial. Aitor llevaba un casco blanco y recibió a lo largo de la mañana 18 impactos, algunos de una fuerza bestial, mientras que yo llevaba uno azul y no recibí ningún impacto. Queda claro que entre el azul y el blanco las gaviotas prefieren atacar al blanco. Quizás porque crean que se trata de otra gaviota.

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Luego ya nos pusimos con el trabajo serio. Primero visitamos la colonia de Garceta común asentada sobre tarays (Tamarix sp.) compuesta actualmente por 9 nidos. No hace mucho criaban unas 35 parejas, pero entre un pedrisco y una pareja de Halcón peregrino (Falco peregrinus) fulminaron la colonia entera entre 2004 y 2005.

Nido de Garceta común

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Pudimos ver los 6 pollos que anilló Aitor la semana pasada, y nosotros conseguimos anillar otros 5 más. Todavía dos nidos tenían huevos sin eclosionar y otro más tenía pollos demasiado pequeños para ser anillados. Las puestas suelen consistir en 5 huevos que los ponen en días sucesivos y empiezan a empollarlos al poner el segundo.

Pollos anillados de Garceta común

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Ahora tocaba el trabajo más duro, anillar Gaviotas patiamarillas. Junto a Jon Hidalgo, Aitor está preparando un estudio de fidelidad de las gaviotas a sus nidos y a sus parejas. Por tal motivo tiene varios nidos marcados con balizas, y ahora toca anillar los adultos de cada uno de ellos. Muchos ya están anillados de otros años, pero aún quedan algunos, bien porque ha habido sustitución de alguno de los cónyuges o porque aún no había sido anillado.

Gaviotas patiamarillas defendiendo sus territorios

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Esta época es el momento más apropiado, pues la mayoría de las puestas aún no están eclosionadas o los pollos son muy pequeños. Pasados unos días tras el nacimiento los adultos ya no entran al nido a incubar, ya que los pollos son nidífugos. Las puestas suelen consistir en 3 huevos.

Nido de Gaviota patiamarilla

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A lo largo de la mañana conseguimos capturar 3 individuos de 3 nidos diferentes, todos hembras, aunque una de ellas nos dejo con dudas debido a sus dimensiones.

Gaviota patiamarilla hembra 4BG.P

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Gaviota patiamarilla ¿hembra? 6B.GP

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La experiencia ha sido como siempre satisfactoria, a pesar de que el acceso no es fácil, y con ganas de repetir. Aunque mucha gente mira con recelo a las gaviotas, a mi me siguen pareciendo unas aves elegantes y de disfrutar como diría mi amigo Magu.