Castillo de Bamburgh
Os envio una crónica del viaje de Escocia, que lo iré subiendo en varias partes, para no hacerlo muy pesado.
Introducción
Eider común
Por fin llegó el día.
Meses antes cuatro amigos decidimos visitar Escocia con la única idea de pajarear. El viaje debía ser corto y barato, lo cual iba a hacer que fuera intenso y arriesgado. Intenso en el tiempo, lo que suponía dedicación exclusiva y arriesgado porque el tiempo atmosférico sería un componente más del viaje.
Puerto de Saint Abb's
Para ello buscamos una compañía aérea de bajo coste, en la cual deberíamos coger los billetes con mucha antelación para reducir costes. Como debía ser corto buscamos toda la información posible, en Internet, por medio de contactos, leímos otros viajes a Escocia, buscamos la distribución de las especies que nos interesaban, y por fin configuramos un viaje acorde con lo que queríamos ver y con el poco tiempo del que disponíamos.
Avefría europea
Nuestro viaje, debía llevarse a cabo entre los días 18 al 24 de Junio, fechas en las que las aves marinas estarían en la costa criando, así como las de montaña y en ésta, las condiciones metereológicas serían más benignas. Además, en esas fechas cuadraban nuestro tiempo libre y los vuelos. Para disfrutar de las aves seleccionadas habíamos elegido las islas Farne, Bass Rock,
Araos comunes y G.tridactilas en las Islas Farne
Alcatraces atlánticos en Bass Rock
Fulmar en los acantilados de Saint Abb's
Alcatraz atlántico
Frailecillos en las Islas Farne
Gaviotas tridáctilas en las Islas Farne
las montañas Cairngorms y la isla de Skye como lugares fundamentales. Como las visitas a las islas tenían un horario, buscamos otros lugares cercanos a éstas donde aprovechar el tiempo, acantilados de Saint Abb’s, ribera del rio Tweed, entre Kelso y Coldstream y el parque de The Hirsel.
Ostrero al borde de la carretera
Con todo preparado, marchamos vía Madrid a Edimburgo tres de los cuatro del grupo inicial, Juanma Domínguez, José Ramón Martín y José Mari Salazar.
Jose Mari, Juanma y Joserra
Días antes del viaje comprobamos por Internet las previsiones del tiempo, y muy a nuestro pesar vimos que éste no nos iba a acompañar. Los cinco días de permanencia en Escocia iban a estar al menos, nubosos y algunos días lluviosos. Teníamos unas probabilidades de lluvia entre el 40% y el 70% según el día. La cosa se ponía fea con respecto al tiempo, pero ya teníamos los pasajes de avión y había que ir.
Focas grises en las Islas Farne
Cuando llegamos las previsiones se hicieron patentes. Cielos muy nubosos y lluvia. Pero al día siguiente amaneció un día brillante. De las previsiones nada más lejos de la realidad, solo uno de los cinco nos llovió, así como el día de llegada y el de la marcha, los demás días disfrutamos de unos días espléndidos, que aunque frescos, fueron ideales para la práctica del pajareo.
Charranes árticos en las Islas Farne
Los días de pajareo han sido intensos como esperábamos y largos. En esta latitud y en esta época del año, amanece a las cinco y media de la mañana y el sol se mete después de las once de la noche. Con lo cual puedes ver varias zonas diarias y disfrutar del pajareo durante muchas horas seguidas.
Ganado vacuno típico de Escocia
Continuará...........................
Hola a todos, un viaje fantástico que me trae muy buenos recuerdos, ya que el año pasado tuvimos ocasión de hacer algo parecido Xulio, Esther Jesús de Castro (como os de Barón Rojo...)y yo. Las fotos una pasada, y qué guay que pudisteis ir a Bass Rock, a nosotros nos hizo mala mar, pero gracias a eso descubrimos Durban.
ResponderEliminarBueno, que feliz regreso y a seguir contando el viaje!
Salva
Alucinante viaje y alucinantes fotos. Creo que me tengo que plantear ese destino como algo para hacer (por lo menos) una vez en la vida.
ResponderEliminarPor cierto, creo que tengo un primo en vuestro grupo... ;-)
Saludos.