El Halcón de Eleonora (Falco eleonorae) es una especie que está dando numerosas noticias en los últimos tiempos.
La primera y quizás la más sorprendente se refiere a su ruta migratoria. Toda la bibliografía antigua suponía para los halcones españoles una ruta costera que en migración postnupcial recorría todo el Mediterráneo hacia el Este hasta alcanzar el Canal de Suez y la península del Sinaí por donde cruzaría hasta alcanzar el Mar Rojo, seguiría hasta Somalia para entrar en el Índico y terminaría por costear Africa Oriental hasta Madagascar. Unos 12000 kilómetros que se repetían en sentido inverso durante la migración prenupcial.
Recientes estudios de seguimiento de ejemplares equipados con emisores gracias a la tecnología de telemetría vía satélite han demostrado que las aves no siguen esa ruta sino una más directa a través del continente africano de unos 8000 kilómetros. Esta odisea les obliga a cruzar lugares tan inóspitos como el desierto del Sáhara en un viaje de 21 a 41 días, cubriendo distancias de entre 150 y 250 kilómetros al día, tanto de día como de noche.
(Datos extraídos de la revista Quercus, Abril 2009)Por otro lado, en los últimos años se están repitiendo las observaciones de ejemplares de esta especie en el interior peninsular antes de iniciar la cría en sus colonias insulares. Así se viene registrando su presencia de forma habbitual en las lagunas de Cantalejo en Segovia En las últimas semanas se estaban escuchando citas en la comarca de Almazán en Soria, cerca de Valladolid capital y en el Monasterio de La Sierra en Burgos entre otros lugares, además de otras citas en el levante peninsular.
Después de consultar en Avesforum sobre la situación actualizada de la presencia de los Halcones de Eleonora se puso en contacto conmigo Juan Luis Hernández y me facilitó información detallada. Sus observaciones se centraban en Soria, en la comarca de Almazán, concretamente en el entorno del pueblo de Matamala de Almazán. Allí habían contado hasta 13 ejemplares la semana anterior.
Un poco más adelante otros 2, uno de ellos una hembra de fase oscura y desde una pista que recorre el perímetro de un pinar un sexto ejemplar. No quedaba apenas luz y volvimos al cerro por si se acercaban los halcones.
Allí nos encontramos con Víctor Salvador e Inma, gente muy maja, que estaban allí para lo mismo que nosotros. Víctor nos contó que en la comarca había una cita antigua de Halcón de Eleonora. Después de conocer las citas de Cantalejo que se habían producido a lo largo de los últimos años sospecharon que la especie debía estar presente en la comarca dado que el hábitat es el idóneo y muy similar al de estas lagunas Segovianas. Se pusieron a buscarlos y Víctor dio con ellos en esta comarca Soriana. Imagino su alegría por el descubrimiento. El año pasado por estas fechas Juan Luis presenció una concentración de unos 40 ejemplares en la comarca. El tiempo pasó mientras comentábamos estas cosas pero los halcones no aparecieron. Nos despedimos al tiempo que un Chotacabras Gris arrancaba motores y volvimos a dormir a Almazán.
A la mañana siguiente regresamos a la zona de la tarde anterior. A la salida de Almazán junto a la carretera, en los cables, se soleaban 2 ejemplares de fase clara, los primeros del día y al llegar a los pinos donde vimos nuestros primeros Halcones de Eleonora localizamos 3 ejemplares entre los que estaba la hembra de fase oscura.
En total fueron 15 ejemplares los que vimos ese día. Fueron abandonando la zona a lo largo de la mañana hasta que desaparecieron y con ellos nosotros que teníamos que volver a casa.
Una suerte poder disfrutar de esta especie en territorio peninsular aunque sólo sea durante unas semanas al año.
Con tantos datos disponibles no me costó demasiado convencer a Juanma para que se uniera al plan, así que el viernes después del curro salimos de Barakaldo y a las 20:00 ya estabamos esperando en un cerro desde el que se suelen ver los halcones al atardecer. Calma chicha hasta que recibimos una llamada de Juan Luis, que en todo momento estuvo pendiente de nosotros por lo que le estamos enormemente agradecidos, y nos informa que un amigo suyo ha visto varios ejemplares junto a la carretera de Fuentepinilla. Salimos para allá y descansando en unas ramas despejadas de un pino localizamos los primeros ejemplares, 3 aves de fase clara.
Foto1. Ejemplar adulto de fase clara.
Un poco más adelante otros 2, uno de ellos una hembra de fase oscura y desde una pista que recorre el perímetro de un pinar un sexto ejemplar. No quedaba apenas luz y volvimos al cerro por si se acercaban los halcones.
Foto2. Hembra adulta de fase oscura.
Allí nos encontramos con Víctor Salvador e Inma, gente muy maja, que estaban allí para lo mismo que nosotros. Víctor nos contó que en la comarca había una cita antigua de Halcón de Eleonora. Después de conocer las citas de Cantalejo que se habían producido a lo largo de los últimos años sospecharon que la especie debía estar presente en la comarca dado que el hábitat es el idóneo y muy similar al de estas lagunas Segovianas. Se pusieron a buscarlos y Víctor dio con ellos en esta comarca Soriana. Imagino su alegría por el descubrimiento. El año pasado por estas fechas Juan Luis presenció una concentración de unos 40 ejemplares en la comarca. El tiempo pasó mientras comentábamos estas cosas pero los halcones no aparecieron. Nos despedimos al tiempo que un Chotacabras Gris arrancaba motores y volvimos a dormir a Almazán.
A la mañana siguiente regresamos a la zona de la tarde anterior. A la salida de Almazán junto a la carretera, en los cables, se soleaban 2 ejemplares de fase clara, los primeros del día y al llegar a los pinos donde vimos nuestros primeros Halcones de Eleonora localizamos 3 ejemplares entre los que estaba la hembra de fase oscura.
Recorrimos varias pistas que salían desde el pueblo de Matamala de Almazán y encontramos 10 ejemplares más, todos ellos de fase clara. Presenciamos como uno de ellos, un subadulto que nos había brindado una larga observación posado en un cable, cazaba escarabajos sanjuaneros en vuelo.
En total fueron 15 ejemplares los que vimos ese día. Fueron abandonando la zona a lo largo de la mañana hasta que desaparecieron y con ellos nosotros que teníamos que volver a casa.
Una suerte poder disfrutar de esta especie en territorio peninsular aunque sólo sea durante unas semanas al año.
Me encantan las fotos que nos regala la naturaleza. Llegué a este blog por accidente (clickeando en el blog de alguien más) pero sin dudas seré visitante asiduo... Desde hoy empiezo a seguirlos!
ResponderEliminarsaludos cordiales desde Argentina,
Warmly,
Javier Echaiz
No se te escapa ni una. Me alegro que Juanma se animara. Muy buena cronica. Hoy mala suerte en Bass rock, no salian los barcos por la mala mar, muchas olas. El espect'aculo impresionante, la roca blanca de aves, y otras tantas voando por la zona.
ResponderEliminarSaludos Juankar