LA COLONIA DE ESTORNINO ROSADO
(sigue de VIAJE A BULGARIA: VALLE DE KRUMOVITSA)
Llegados a Asenovgrad tomamos aposento en el hotel Stari Vremena. Allí comemos y tras el almuerzo nos dirigimos a una cantera al oeste de Plovdiv donde hay una colonia de aproximadamente 200 ejemplares de Estornino rosado (Sturnus roseus).
En la cantera hay una pequeña zona encharcada, y a ella acuden a beber tanto Estornino rosado (Sturnus roseus) como Estornino pinto (Sturnus vulgaris).
No son los Estorninos los únicos en aproximarse a la lámina de agua, el líquido elemento concentra a otras especies, como es el caso de este simpático límicola que a menudo podemos ver en charcas de canteras y graveras: el Chorlitejo chico (Charadrius dubius).
El movimiento de Estorninos rosados (Sturnus roseus) entre la cantera y la charca es continuo.
Algunos individuos se posan en las orillas de la charca para saciar la sed, pero se muestran en todo momento esquivos y vigilantes.
Cualquier movimiento en la zona hace que los Estorninos rosados (Sturnus roseus) levanten raudos el vuelo y regresen a la cantera o se posen en los chopos cercanos.
Algunos se posan en las copas de los árboles. A duras penas, las tiernas ramas de los chopos lograr aguantar su peso.
Nuevas especies hacen su aparición por la charca, moviéndose inquietas y tomando posición a la espera de que les toque su turno de bebida.
Incluso una vez calmada la sed, muchas especies como este Escribano hortelano (Emberiza hortulana) optan por combatir el calor con un reparador baño.
De nuevo es el turno de los Estorninos rosados (Sturnus roseus), como este individuo al que Juanma no duda en retratar cuando se le cruza en el objetivo de su cámara.
Despues de saciar la sed, este bonito Estornino rosado (Sturnus roseus) se posa por unos instantes en uno de los chopos para, acto seguido, levantar el vuelo dirigiéndose a los campos de cultivo cercanos.
Cuando vamos a retirarnos, después de un buen rato disfrutando con las especies que se acercan al improvisado "bebedero", vemos acercarse a un bonito pajarillo que nos ha acompañado día tras día a lo largo y ancho de Bulgaria.
Vídeo de Escribano cabecinegro
Después del baño esta es la imagen que presenta este Escribano cabecinegro (Emberiza melanocephala) que tanto juego a dado a l@s fotógraf@s de nuestro grupo.
Al regresar al minibús, acompañados por el sonido de la Codorniz común (Coturnix coturnix) en los campos de cultivo cercanos, cruza raudo ante nuestros ojos un Busardo moro (Buteo rufinus). Juanma, Agustín y Leo compiten en ver quien "desenfunda" primero la cámara. Este es el resultado.
Regresamos al hotel, los objetivos han sido cumplidos. Steve, nuestro amigo y organizador del viaje y que ha estado durante todo el periplo búlgaro atento a que todo fuera bien, que ha estado pendiente de tod@s y que ha dado la "caña" necesaria para que los guías búlgaros fueran cumpliendo nuestros planteamientos y objetivos..., por fin se puede relajar y soñar con nuevos retos, nuevos destinos, nuevas especies....
Después de cenar hacemos entre tod@s un "grato" balance de nuestras observaciones en Bulgaria. Después salimos a tomar unas "últimas" cervezas en los coquetos bares que jalonan el paseo fluvial de Asenovgrad.
El día 13 toca regreso. Enfilamos hacia Sofía. En el camino paramos a visitar un monasterio ortodoxo. Se trata del majestuoso lugar de culto y peregrinación de los ortodoxos búlgaros, el Monasterio de Bachkovo.
Allí, aprovechamos que es la última parada antes de llegar al Aeropuerto de Sofia y hacemos la foto de todo el grupo.
De izquierda a derecha: Juanma, Nikki, Loreto, Ignacio, Agus, Leo, Nat, Mladen;
en cuclillas: Cris, Steve y Patxeko.
en cuclillas: Cris, Steve y Patxeko.
En las cercanías de Sofía cruza la carretera el único "artilugio" mecánico que hemos visto abonando químicamente los campos búlgaros. En este caso se tratan de plantaciones de arroz.
Llegamos al aeropuerto y allí nos despedimos con alegría por lo bien que lo hemos pasado y con la tristeza de tener que dejar a compañeros y compañeras con los que hemos pasados gratos y emocionantes días. Quizás..... nuestros caminos vuelvan a cruzarse y unirse algún día en cualquier lugar del mundo en el que la naturaleza tenga "vida salvaje" que mostrarnos, pero ahora el grupo del Norte de la Península Ibérica tiene un avión en pista listo para devolvernos a casa.
P.D.: En una posterior entrada en este blog, os mostraremos a las personas que compusieron nuestra expidición y que quisiera que fueran un homenaje a compañeros y compañeras de los que guardo un grato recuerdo.
Este viaje se acabo amig@s...................
Algún año me uniré a vosotros. Por cierto, en la revista "Aves y naturaleza " de SEO, se habla de vuestro viaje.
ResponderEliminarSaludos Juankar.