El viernes pasado fui a Salburua a tratar de ver al ánsar campestre que estos días descansa en esa laguna. Tuve una larga espera, hasta que decidió salir de su escondite, gracias al movimiento que hicieron un grupo de machos de ciervo por la laguna y por fin lo pude observar y afotar.
Podéis verle en
http://miradascantabricas.blogspot.com.es/2012/11/salburua-ansar-campestre.html.
Durante la espera saque una buena partida de fotos y entre ellas estas de los ciervos.
En Salburua el exceso de crecimiento de la vegetación palustre se controla con una pujante población de ciervo, descendientes de otros traídos del cercano monte Gorbea. Aquí, de salvajes montaraces se han convertido en plácidos palustres y como se sienten libres de predadores, su única preocupación es comer, y de eso tienen en abundancia y así están gordos y rollizos, nada que ver con los ciervos de Campoo que nos ha mostrado nuestro amigo Manu.
Algunos machos, dada la cuerna que portan, son merecedores de premio de oro o algo parecido, según la clasificación de esos cejijuntos que se dedican a proteger a la naturaleza a base de dar tiros a todo lo que se menea. Que buena envidia pasan viéndolos allí cerquita y sin poderles meter un tiro. Esos comentarios también se oyen en el observatorio por parte de algún visitante.
Pero que sigan pasando envidia viéndolos mientras nosotros disfrutamos haciendo lo mismo.
Desde luego sí que están bien cuidaos esas "segadoras con cuernos", comida sin duda no les faltara... menuda suerte que han tenido y ellos sin saberlo.
ResponderEliminarun saludo!!
Estos ciervos no son del Gorbeia ni mucho menos, son de la subespecie de Escocia (Cervus elaphus scoticus).
ResponderEliminarEstaban en una granja para carne que estaba a mano y ahora en vez de criarlos allí lo hacen en Salburua.
Todos los años intentan "retirar" unos cuantos. Pero he oído criticas sobre la densidad que dejan o sobre que se usaran estos ciervos en vez de otros cervidos para controlar la vegetación palustre. Desconozco el tema en profundidad así que no me pronuncio.
Lo que esta claro es que de forma natural no debería haber tantos. Y al haberlos pues causaran molestias y pisotearan más puestas, como es normal...