martes, 19 de julio de 2016

Luna de miel del Chorlitejo chico (charadrius dubius) en el canal de Deusto.

Chorlitejo chico (charadrius dubius) criando en el interior del canal de Deusto entre proyectos urbanizables ya empezados, una misera charca en el espigon es su unica salvavidas, con permiso de patiamarillas y sombrias, y como no, aqui tambien aparece a pagar su sed teniendo todos los derechos adquiridos, el Cernicalo vugar (Falco tinnunculus )
  Chorlitejo chico (charadrius dubius) siempre vigilante

 
Chorlitejo chico (charadrius dubius) haciendo guardia
el pequeño Chorlitejo chico (charadrius dubius)viviendo con escasez ( bueno, como  casi todos)

Chorlitejo chico (charadrius dubius)cuidando de sus tres retoños,

Chorlitejo chico (charadrius dubius)sin perder de vista a su prole.
Chorlitejo chico (charadrius dubius)subsistiendo como puede.

Chorlitejo chico (charadrius dubius)esta vigilante y mandando notas de aviso a su pequeño.

Chorlitejo chico (charadrius dubius) observando el posible peligro  que acecha desde las alturas a sus crias indefensas.

el jovencisimo  Chorlitejo chico (charadrius dubius)recorre su charca donde a nacido, para el es gloria bendita.
Chorlitejo chico (charadrius dubius) haciendo guardia en la orilla del canal.
Chorlitejo chico (charadrius dubius)se han extremado las precauciones.
Cernicalo vulgar (Falco tinnunculus) ha venido a saciar la sed,y se a encontrado con un panorama de vigilancia.
Chorlitejo chico (Charadrius dubius)  mas vigilante que nunca.
Chorlitejo chico (Charadrius dubius)  guardando el sitio que eligio.
Chorlitejo chico (Charadrius dubius) en la orilla del canal









3 comentarios:

  1. ¡Enhorabuena!
    Es un don y un arte descubrir estos retazos de vida silvestre aqui donde vivimos.
    Pero por otra parte... ya le vale a esa pajarilla! pobres criaturitas, qué estrés!!
    Gracias por el regalo!

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  2. El arte de descubrir a esta familia de Chorlitejos se lo debemos a Miguel de (LARIUS)que le mando un saludo desde esta pagina de MIRADAS CANTABRICAS.

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  3. Afortunadamente hay más habitantes silvestres de lo que pensamos...

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