Parece mentira pero subimos casi 3.000 metros para ver unas perdices. Disfruté viendo las perdices, pero disfruté mucho más viendo subir a estos tres monstruos del alpinismo.
Fue un día de pajareo de altura con una sorpresa final, a la noche cerca del refugio pudimos hacer una foto que nos sorprendió a los cuatro. La solución de la foto misteriosa en la siguiente subida, con las fotos de Tomas.
1 comentario:
Despues de ver vuestras fotos de montañeros me ha entrado una envidia!!!!!
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