VIAJE A OMÁN: AL BATINAH (2ª PARTE)

El día 17 dedicamos prácticamente toda la mañana a las Sun Farms, donde engordaría nuestra lista de aves observadas. Lo primero que vimos fue un Águila imperial oriental posada en lo alto de un árbol y un ejemplar de Águila moteada deambulando sobre una zona más boscosa. Mientras en los bordes del camino descansaban Avefrías indias y Francolines grises.

Nos acercamos de nuevo a la zona de regadío y entramos con el coche en la zona segada. Enseguida nos recibieron las Carracas indias, alguna de las cuales incluso uso nuestro coche como atalaya para capturar saltamontes. Pero nuestro objetivo era prospectar un grupo de limícolas que se encontraban allí. Nos fuimos acercando hasta tener una buena visión del grupo, que estaba integrado por decenas de Combatientes y de Chorlitos dorados siberianos, pero también de 4 Avefrías sociables, una especie amenazada a nivel mundial y que en Omán tiene importantes cuarteles de invernada.

No fue la única alegría del día. Ahora nos desplazamos hacia la zona de hierba alta, bordeándola por una pista que iba a ser el gran descubrimiento. En los cables del tendido eléctrico se posan varias aves con la cola muy larga. Ante nuestros prismáticos teníamos 6 Tortolitas rabilargas, una especie difícil de observar.

Por el suelo, cerca de la hierba, se movían multitud de bisbitas, donde predominaban los Bisbitas campestres, pero también había bastantes Bisbitas alpinos y algunos Bisbitas de Richard, e incluso llegamos a ver por un instante un bisbita más pequeño y que se movía con el cuerpo agachado. La mente rápida de Iván enseguida pensó en un Bisbita de Blyth, pero el ave levantó el vuelo y no pudimos confirmarlo.

Al otro lado del coche, el suelo estaba seco y más arenoso, pero no por ello fue menos interesante, apareciendo varias Terreras negritas alimentándose.

De vuelta, hacia la pista principal, vemos un par de aves posadas en lo alto de una piedra, pero el fuerte contraluz no nos permite verlas bien. Al acercarnos vemos que se tratan de 2 Escribanos estriados.

Volvemos a la zona segada, pero ahora entramos desde otro punto, aquí detectamos nuestras primeras Alondras comunes y Trigueros, mientras las Cogujadas comunes son numerosas. Muy cerca de nuestro coche vemos dos aves más regordetas, nos detenemos para observarlas con más detenimiento, y para nuestra sorpresa tenemos 2 Calandrias bimaculadas ante nuestros ojos.

Con todas estas observaciones en nuestras retinas, nos dirigimos hacia las balsas de recolección de agua situadas en la parte posterior de los establos. No dábamos crédito a la gran concentración de aves que había en el lugar: Avefrías indias y coliblancas, Fumareles cariblancos y aliblancos, Zarapitos reales, Combatientes, Andarríos chicos, grandes y bastardos, Correlimos menudos y de Temminck, Cigüeñuelas, Garzas reales, Garcetas dimorfas, Garcillas bueyeras, Agachadizas comunes. Era increíble como un sitio tan pequeño albergaba tal cantidad y variedad de aves.

Nos fuimos desplazando con el coche por sus estrechos diques y a cada giro nos encontrábamos con una especie nueva. Entre las Lavanderas pudimos observar varios ejemplares de Lavandera cetrina y un ejemplar de Lavandera blanca enmascarada.

Pero la gran sorpresa fue ver un Avetorillo caminando cual garceta por el borde de una balsa prácticamente desprovista de vegetación. Y aún mayor fue comprobar que se trataba de un Avetorillo chino, del cual apenas existen citas en el norte del país.

Con el zurrón lleno de grandes y buenas observaciones dejamos el lugar y nos desplazamos hasta Ras As Sawadi, una zona costera ante la cual hay varios islotes donde en verano cría el Halcón pizarroso. Primero hacemos una parada en el As Sawadi Beach Resort, para visitar sus jardines que atraen a bastantes aves. Entre otras especies observamos a los Bulbules cafre y árabe.

Cuando llegamos a Ras As Sawadi, nos dimos cuenta que no habíamos elegido bien el momento de visitarlo. Debía de ser día festivo, pues la playa y sus aledaños se encontraba totalmente llena de coches y de gente, así como los islotes más accesibles, por lo que desestimamos el intentar ver aves desde allí.

Retrocedimos sobre nuestros pasos hasta el pueblo y desde sus traseras, entre casetas de pescadores nos pusimos a ver las aves marinas. No conseguimos ver ningún Halcón pizarroso, pero a cambio observamos un ejemplar de Charrán sombrío, entre varios Charranes bengalíes y piquigualdos, así como Gaviotas cáspicas y de estepa.

Con los últimos rayos de sol, dimos por concluida la visita, a la vez que veíamos a un grupo de Tordinos árabes, y oíamos el canto insistente de las Prinias gráciles.

Esta noche la pasamos en el Al Reef Al Lebnani Hotel, en Muscate, ya que nuestra intención era emprender viaje hacia el sur al día siguiente.

CONTINUARÁ.....