El paisaje es uno de los elementos que caracterizan al Pais Vasco, y es en el Parque Natural de Urkiola y su entorno donde se pone de manifiesto su grandiosidad. Las formas del territorio, configurando crestas y simas; la vegetación que lo cubre y la fauna que allí habita; las aguas que discurren o se remansan; el viento, el sol, las lluvias, la niebla o la nieve, que le confieren esa tonalidad indescriptible; las cuevas, los torreones, las ermitas y las iglesias, las txabolas y los caseríos; el hombre, sus familias y antepasados; los hechos, las leyendas, cuentos, mitos y recuerdos...... , todo ello es el paisaje.
Gizakia, lurra zein ganadua, mendien babesa zutelarik, eguraldi txarraren menpe egon izan dira. Inguruan duten izadiak, hots, haitz, baso, haran, lanbro eta laino lodiek baserrietako beheko suaren ingurura gau luzeak ugarotera eramaten zituzten gizakiak, halakoetan fantasiazko zein misteriozko hainbat ata hainbat ipuin sortzea ekarriz.
Acogidos por las montañas, hombres, tierras y ganado han estado a merced de las inclemencias del tiempo. La naturaleza que les rodea, roqueros, bosques, valles, brumas y nieblas espesas se ocuparon de que estos hombres pasaran largas noches alrededor del fuego en los caserios, uno de cuyos frutos ha sido un sinfin de cuentos, historias y leyendas fantásticas y misteriosas.
Kristiautasuna sortu baino askozaz ere lehenagoko garaietan, Urkiola leku sakratu agina izateak, " Amalur-etxea " euskal mitologiaren erdigune bihurtu zuen, Mari jainkosa, lurraren personifikazioa eta izadiko gauzetaz iharduten zuten jeinu guztien erreginak zelarik.
La sacralización de Urkiola, en épocas muy anteriores al cristianismo, consideraba la tierra " Amalur-etxea " como el centro de la mitología vasca, siendo la diosa Mari la personificación de la tierra y la reina de todos los genios que se ocupaban de las cosas de la naturaleza.
El día que decidí intentar el roquero solitario los pronosticos del tiempo eran favorables, pero parece que Mari cambió de opinión, y las nieblas cubrieron las montañas.
Como no podía moverme mucho me dedique a fotografiar las flores y los caracoles de la montaña. Si alguien puede decirme el nombre de los caracoles y aportar algo sobre las flores, le estaré muy agradecido.
Serpol, Erle bedarra Thymus praecox
Euphrasia alpina
Poco a poco se fue levantando la niebla, la primera impresión fue de vértigo, menuda altura había subido; luego se fueron abriendo claros y entre ellos los primeros buitres en sus torretas. Y un pardillo muy cerca en el la copa del árbol.
Pero la sorpresa llegó al darme la vuelta y ver lo cerca que tenía la pared, y la cantidad de buitres que estaban esperando algo de calor para remontar el vuelo.
Por fín apareció un roquero solitario, y bien solitario; pero subió tan rápido la increible pendiente de la zona, que me fue imposible seguirle.
Caladito por la niebla y el rocio de la hierba, bajé despacito con la idea de seguir intentandolo otro día. Claro que primero le preguntaré a Mari el pronostico del tiempo para saber que ropa llevar.
2 comentarios:
Bonito reportaje Juankar ,me gusta tu narración, efectivamente los paisajes por los que transitamos esconden muchas "cosas" más de las que a simple vista nos muestran.
Salud
Pedro Decimavilla
This is truly a heaven for many living creatures, plant or animal.
I am amazed ...
Greetings from Malaysia.
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