El sábado 15 de Agosto estuvimos Cristina y yo en los alrededores de Villamartin de Sotoscueva. Nuestra intención era fotografiar a una pareja de Aguilucho cenizo que cría allí. Esta es una zona de transición entre el ecosistema atlántico y el mediterráneo.
La rapaz andaba esquiva y patrullando constantemente el segado campo de cereal, por lo que solamente pudimos hacerle alguna foto testimonial.
La rapaz andaba esquiva y patrullando constantemente el segado campo de cereal, por lo que solamente pudimos hacerle alguna foto testimonial.
La temperatura era de 30 grados, viento sur y un cielo cargado de nubosidad que vaticinaba tormenta, pero las nubes pasaron de largo sin descargar aquí ni una sola gota de agua, aunque oíamos como por los alrededores tronaba sin cesar.
Mientras seguíamos las evoluciones de la hembra de Aguilucho cenizo, quizás inquieta por la agitada meteorología, vimos acercarse un nutrido grupo de 40 Cernícalos primillas. Venían de dirección Noroeste, de la zona de la Vega de Pas. Pasaron por encima de nuestras cabezas y cogiendo altura tomaron rumbo Sureste.Posteriormente otro grupo de 20 Primillas siguió al primero. De ambos grupos se quedaron en la zona algunos individuos, doce ejemplares para ser más exacto.
Utilizando los cables y torretas eléctricas a modo de posadero pasaron toda la tarde, aún permanecían al anochecer, cazando en los campos de cereal de la zona.
Para nosotros fue sorprendente ya que hasta ahora no habíamos visto a la especie en la zona. Aunque las fotos no sean lo cercanas y precisas que hubiéramos deseado si que se pueden apreciar en ellas los rasgos de esta especie que la diferencian de su pariente el Cernícalo vulgar: Aunque las uñas no se ven perfectamente, las que se dejan ver un poco son pálidas, la bigotera es bastante corta y la cara inferior de la cola tiene un barreado muy tenue (salvo las barras terminales), característica típica de los Primillas ya que los Vulgares tienen un barreado más intenso.
Utilizando los cables y torretas eléctricas a modo de posadero pasaron toda la tarde, aún permanecían al anochecer, cazando en los campos de cereal de la zona.
Para nosotros fue sorprendente ya que hasta ahora no habíamos visto a la especie en la zona. Aunque las fotos no sean lo cercanas y precisas que hubiéramos deseado si que se pueden apreciar en ellas los rasgos de esta especie que la diferencian de su pariente el Cernícalo vulgar: Aunque las uñas no se ven perfectamente, las que se dejan ver un poco son pálidas, la bigotera es bastante corta y la cara inferior de la cola tiene un barreado muy tenue (salvo las barras terminales), característica típica de los Primillas ya que los Vulgares tienen un barreado más intenso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario