TEXTO: Jon Fernández Pérez (Presidente del Grupo Ibérico de Aracnología)
Este escarabajo pertenece a la familia de los Cerambycidae. Mide entre 18-45 mm. Es de color castaño oscuro, algunos ejemplares son casi negros y otros ligeramente rojizos. Los machos y las hembras se diferencian por la forma de las antenas. Los machos las poseen robustas y aserradas, con 12 artejos. Mientras que las de las hembras son finas y filiformes, con 11 artejos. Los adultos aparecen entre junio y septiembre y son atraídos por la luz artificial. Las larvas se desarrollan en madera muerta, tanto de frondosas (roble, haya, castaño, fresno, etc.) como de coníferas (pino y abeto) y también se alimentan de raíces muertas. Necesita de al menos 3 años para completar su ciclo vital.
Algunas aves, como los pájaros carpinteros, se alimentan tanto de las larvas como de los adultos, por lo que son importantes en la cadena trófica.
Se distribuye por zonas forestales de Europa, norte de África, Turquía, el Caucaso, la zona Transcaucásica e Irán. En la Península Ibérica se ha registrado en la mitad norte. En Vizcaya no es una especie muy abundante, pero se observa en toda su geografía de forma esporádica sobre los troncos de los árboles donde se desarrollan las larvas. También suele ser atraída por las farolas del alumbrado público. En Guipuzcoa si que la he visto bastante, sobre todo en hayedos trasmochos. Xanti Pagola, que ha hecho el seguimiento de la Rosalia alpina en el P.N. de Aiako Harria (Oiartzun), afirma lo mismo. Supongo que en Alava será relativamente común, porque los bosques están mejor conservados y tienen más árboles viejos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario