Maratón ornitologico en La Rioja

El día amaneció lluvioso y con muy mala pinta, y mas si teníamos que cruzar la Sierra de Cantabria a 1200 m de altura por el paso del Toro. Pero allí estábamos reunidos, Juanma, Ivan, Juankar, Tomás y Jose Mari para hacer el maratón ornitológico de este año. No nos podíamos echar atrás. Paraguas en ristre comenzamos el maratón iniciando la subida.

Subida de Lagrán a la Sierra Cantabria

Como era el primer tramo las especies de aves las contábamos sin parar, primero las aves de pueblo, después las de los campos cercanos para continuar con las del bosque atlántico.

El bosque, es un hayedo sombrío de grandes hayas esbeltas, de troncos derechos buscando el cielo, con un cerrado sotobosque en el que predomina el boj.

                                                 Juankar,Tomas,Ivan y Juanma en el hayedo

Cuando llegamos al alto de la dorsal de la sierra en cielo se había despejado, dejando ver los picos calizos que nos rodean, sobresaliendo de ellos la Cruz del Castillo.
                                                             Pico La Cruz del Castillo

A un lado dejamos la vertiente norte poblada por el hayedo, debajo el pueblo de Lagran del que partimos. Al otro lado la vertiente meridional, mas seca, predominada por quejigos y encinas y al fondo Laguardia y toda La Rioja.

                                                                      Paso del Toro

En el paso del Toro, un estrecho paso entre cortados rocosos, los prados se enseñorean del lugar. Aquí pudimos deleitarnos buscando al roquero rojo, que antes había detectado Tomás. Chovas y buitres dominaban la escena. Los herbazales repletos de gencianas azules, con tal densidad que había zonas en donde solo estaban estas bonitas flores alpinas.
                                                                 Gentiana angustifolia

                                                                 Fritillaria pyrenaica

En el descenso la flora mas mediterránea, bajo los quejigos y encinas prosperan los jaguarzos, jara de flores violetas, los linos, y algunas orquídeas. 

  Cistus albidus

  Linum narbonense 

Arriba quedan los cortados rocosos y nos vamos introduciendo a medida que bajamos en ralos bosquetes de quejigos y entre ellos zonas de matorral mediterráneo. Después los campos de labor donde la vid se adueña del paisaje. Himantoglossum hircinum

  Platanthera bifolia 

Una vez en Laguardia, el tiempo caprichoso se vuelve de nuevo lluvioso. Y de nuevo paraguas en ristre nos dirigimos a las lagunas, donde tenemos la esperanza de contabilizar un buen numero de especies de aves. Garzas reales, imperiales, martinetes, somormujos, carriceros, abejarucos.... pero nos faltan algunas que deberían estar.
Seguimos nuestra ruta siguiendo el GR38 llamado la Ruta de vino y el pescado, descubriendo cernícalos, collalbas rubias, alcaudones dorsirrojos, comunes y meridionales.
La tarde se nos acaba y aun estamos lejos de nuestro destino, Logroño. Nos entran las prisas por llegar, pero todo se aúna para retrasar esa llegada, caminos embarrados, caminos sin salida.
Estamos cansados y nos quedan muchos kilómetros de camino.
Llegaremos?
La tarde se acaba, y ya no hay mas especies de aves que descubrir y para colmo empieza a llover, y con la lluvia el frío.
Con paso agónico nos acercamos a Logroño, pero aun nos queda una hora de camino, si nadie lo remedia. Afortunadamente alguien lo remedia, para su coche y nos invita a llevarnos.
En que estado nos vería?
Al poco tiempo todos estábamos en nuestro coche, regresando a recoger los otros vehículos y dar por terminada la excursión. Cansados pero contentos pues nos hemos superado con respecto al pasado año, nada mas y nada menos que 91 especies de aves localizadas en el trayecto